La semana de doblanza ya se me está haciendo cuesta arriba: la primera lagrimita está cayendo desde mi ojo derecho. A dos días de terminar de cubrir vacaciones, no sé si lloro de desesperación o de esperanza. Y sí, así soy yo, lloro por un sólo ojo. Soy un chico fuerte.
Las horas valle, sobre todo las de la tarde, son las más letales. En estos "descansos" de agosto las ideas tontas y sin sentido llaman a la puerta del cerebro para no aportar nada nuevo, pero...ahí están. Perdiéndome en una espiral de lucecitas.
Y Teddy está también de vacaciones...
No hay comentarios:
Publicar un comentario